lunes, 28 de marzo de 2011

Hola lectores, les cuento que tuve una conversación con mi mejor amigo muy graciosa:
C: Me dijo "x" que él estaba mal. Y quiero hablarle, no sé que hacer
N: si te necesita te hubiese hablado
Lo peor es que tiene razón. Espero que hoy duelas, y que mañana seas solo un recuerdo. Bien, dicen que la realidad nos engaña y la fantasía nos confunde. Para mi la realidad se terminó y la fantasía se fue. Osea, no me queda nada más que recuerdos. 
Yo estaba contenta por mi, y me faltaba muy poco para estar, de algún modo, "feliz". Y eso es lo que me enoja, porque se que ser derrumbado del todo es feo, pero estar a muy poco de una especie de "felicidad" y no poder conseguirla, duele mucho. Ahora solo me queda atesorar esos momentos y guardarlos "bajo llave" en mi cabeza.
Saben, a diferencia de otros sentimientos y emociones, saben que me gusta del dolor? Que nunca te decepciona, siempre duele y siempre cumple lo que promete. Y cuando no sabés porqué te duele, siempre vuelve a vos y te lo hace recordar. También me gusta porque es la forma en que me doy cuenta que no estoy muerta, todavía. Y lo que no me mata me hace más fuerte, por eso soporto todo esto. Y no es que me sigas importando, simplemente es que es difícil olvidarse de alguien con quien imaginaste el futuro. Hay veces que me pongo a pensar como hubiera sido todo junto a vos. Pero no quiero pensar porque no quiero que el dolor del corazón se una al dolor del pensamiento. Eso me mataría. 
Voy a decirlo de una vez: no se trata de evitar el dolor, de esconderlo... se trata de no llegar a ese momento para que duela. Pero creo que todos somos idiotas que no saben como hacerlo. Asique cuando alguien se de cuenta que no tiene que entrar en esa instancia porque sabe que le va a doler, me avisa! Y me tira algunos síntomas.
Igualmente hay dolores más crueles, y son aquellos que no nos dejan disfrutarlos. No nos dejan abrazarlos, y esos son lo que no nos va a alcanzar la vida para saber lo que son. 
Voy a empezar a decir NO al estar triste, porque la tristeza no es más que la distracción del alma. Y cuando ésta  vuelve a despertar se da cuenta que la vida es corta para llorar. Asique bueno, gente! Vendo cuerpo sin alma, corazón roto e inteligencia agotada. 

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